Laboratorio del sueño en Bonham, Texas

TMC Bonham tiene dos dormitorios privados para ayudar a diagnosticar y tratar la mayoría de los trastornos del sueño, incluida la apnea del sueño. En muchos casos, un estudio del sueño durante la noche es la mejor manera de determinar si tiene un trastorno del sueño. Un buen estudio de sus patrones de sueño también requiere que se sienta cómodo. Nuestras habitaciones para dormir están equipadas con una cama tamaño queen, baño privado y TV.

También ofrecemos estudios del sueño en el hogar para que los pacientes tengan la opción de dormir en la comodidad de su propia cama. Los pacientes se reúnen primero con un especialista del sueño en el hospital para aprender a usar el equipo de grabación portátil, que cabe en la palma de la mano.

Alrededor de 30 millones de estadounidenses sufren de apnea del sueño, según la Asociación Médica Estadounidense. Si no se trata, la apnea del sueño puede aumentar su riesgo de desarrollar presión arterial alta, diabetes y otras afecciones de salud crónicas. Algunos síntomas incluyen dolores de cabeza matutinos, aumento de peso, somnolencia y deterioro del funcionamiento durante el día.

Muchos no se dan cuenta de que tienen un problema médico grave relacionado con el problema del sueño e ignoran los síntomas.

  • ¿Tú roncas?
  • ¿Tienes problemas para dormir por la noche?
  • ¿Siempre estás cansado o te duermes sin previo aviso en momentos inconvenientes e incluso peligrosos?
  • ¿Te despiertas a menudo con dolor de cabeza?

Hacer una cita

Si tiene estos síntomas o ha notado que un ser querido los tiene, le recomendamos que hable con su médico sobre la programación de un estudio del sueño. Para obtener más información o para programar una cita, llame al 903-640-7377.

¿Qué es la apnea del sueño?

La apnea del sueño se caracteriza por una serie de pausas involuntarias en la respiración o “eventos apneicos” durante una sola noche de sueño, a veces hasta 20 a 30 o más eventos por hora. Estos eventos casi siempre van acompañados de ronquidos entre los episodios de apnea, aunque no todos los que roncan tienen apnea del sueño. La apnea del sueño también se puede notar por sensaciones de asfixia. Las frecuentes interrupciones del sueño profundo y reparador a menudo provocan dolores de cabeza temprano en la mañana y somnolencia diurna excesiva.

La apnea ocurre cuando los músculos de la garganta y la lengua se relajan durante el sueño y bloquean parcialmente la apertura de las vías respiratorias. Durante el evento apneico, la persona no puede respirar oxígeno y exhalar dióxido de carbono, lo que resulta en bajos niveles de oxígeno y mayores niveles de dióxido de carbono en la sangre. La reducción de oxígeno y el aumento de dióxido de carbono alertan al cerebro para que reanude la respiración y provoque una excitación. Con cada excitación, se envía una señal desde el cerebro a los músculos de la vía aérea superior para abrir la vía aérea. Se reanuda la respiración, a menudo con un fuerte resoplido o jadeo. Las excitaciones frecuentes evitan que una persona obtenga suficiente sueño reparador y profundo.

Diagnóstico y tratamiento del trastorno del sueño

El diagnóstico de los trastornos del sueño no es sencillo porque puede haber muchas causas diferentes. Los médicos de atención primaria, los neumólogos, los neurólogos u otros médicos con formación especializada en trastornos del sueño pueden participar en la realización de un diagnóstico definitivo y en el inicio del tratamiento.

Las pruebas disponibles para ayudar a un médico a diagnosticar un trastorno del sueño incluyen:

  • Polisomnografía — Un estudio del sueño en el laboratorio que registra una variedad de funciones corporales durante el sueño, como la actividad eléctrica del cerebro, el movimiento de los ojos, la actividad muscular, la frecuencia cardíaca, el esfuerzo respiratorio, el flujo de aire y los niveles de oxígeno en la sangre.
  • Prueba de latencia múltiple del sueño (MSLT) — Una prueba que mide qué tan rápido se queda dormido y si inmediatamente entra en un sueño profundo, llamado REM. Las personas que no tienen problemas para dormir suelen tardar en promedio de 10 a 20 minutos en conciliar el sueño y no se duermen profundamente de inmediato.
  • Valoración — Un estudio del sueño en el laboratorio para determinar qué nivel y tipo de terapia de presión positiva en las vías respiratorias (PAP) es la más apropiada para usted. Es el mismo estudio que un estudio de sueño nocturno (también conocido como polisomnograma o PSG), excepto que antes de irse a dormir, se le coloca una máscara que administra PAP, que mantendrá abiertas las vías respiratorias mientras duerme y evitará la apnea.
  • Prueba de sueño en casa — Una prueba abreviada que controla la frecuencia cardíaca, el esfuerzo respiratorio, el flujo de aire y los niveles de oxígeno en la sangre. Se puede realizar en la privacidad de su hogar y se puede utilizar para diagnosticar la apnea del sueño obstructiva o central.